A veces es necesario perderse del todo para saber a donde quieres ir. Empieza un nuevo año y esta vez, en vez de una lista de propósitos de año nuevo, lo que quiero hacer es definir mi mapa de vida. Tranquilidad, no me volví loca, filosófica o cultureta profunda. Aunque eche de menos mi aspecto con gafas, no me convertiré en una gafa – pasta, jeje. Pero estoy en un momento de transición. No quiero estar atrapada en mí misma y pondré todo de mi lado para alcanzar una tranquilidad autosuficiente :).
Hacer bloody marys los domingos, pasear por Madrid, alquilar una bici, cocinar de nuevo, hacer tardes intensivas de películas, viajar…
Mi mapa de vida no se reducirá a “hacer más deporte” o “decirle a mi madre que la quiero” (que también) sino a identificar todas aquellas cosas que tengo que hacer para que dentro de unos años, cuando mire atrás, siga teniendo la misma sensación que hasta ahora: que hice todo lo que quise en el momento que me pareció adecuado.
Por ahora, ya hay algunas cosas, y estoy decidida a intentar que mi vida sea todo lo plena y feliz que pueda!
¿Ya tienes el tuyo?
Mi mapa de vida no se reducirá a “hacer más deporte” o “decirle a mi madre que la quiero” (que también) sino a identificar todas aquellas cosas que tengo que hacer para que dentro de unos años, cuando mire atrás, siga teniendo la misma sensación que hasta ahora: que hice todo lo que quise en el momento que me pareció adecuado.
Por ahora, ya hay algunas cosas, y estoy decidida a intentar que mi vida sea todo lo plena y feliz que pueda!
¿Ya tienes el tuyo?