jueves, 17 de enero de 2008

Nuevo rumbo


A veces es necesario perderse del todo para saber a donde quieres ir. Empieza un nuevo año y esta vez, en vez de una lista de propósitos de año nuevo, lo que quiero hacer es definir mi mapa de vida. Tranquilidad, no me volví loca, filosófica o cultureta profunda. Aunque eche de menos mi aspecto con gafas, no me convertiré en una gafa – pasta, jeje. Pero estoy en un momento de transición. No quiero estar atrapada en mí misma y pondré todo de mi lado para alcanzar una tranquilidad autosuficiente :).
Hacer bloody marys los domingos, pasear por Madrid, alquilar una bici, cocinar de nuevo, hacer tardes intensivas de películas, viajar…
Mi mapa de vida no se reducirá a “hacer más deporte” o “decirle a mi madre que la quiero” (que también) sino a identificar todas aquellas cosas que tengo que hacer para que dentro de unos años, cuando mire atrás, siga teniendo la misma sensación que hasta ahora: que hice todo lo que quise en el momento que me pareció adecuado.
Por ahora, ya hay algunas cosas, y estoy decidida a intentar que mi vida sea todo lo plena y feliz que pueda!
¿Ya tienes el tuyo?

La fiesta camara café del boxeo



La gran fiesta
Al final, la fiesta no nos defraudó. Fue muy divertida, aunque yo no vi ninguna de las novedades “espectaculares” de este año como los tíos que tocaban los tambores, el avión de hielo gigante relleno de orujo y creo que hasta algún mini fuego artificial! Lo único que se es que el pabellón del ifema me parecía el bar de Moe, familiar y con gente conocida. Vamos, que podéis deducir que lo primero que debería hacer en una fiesta de estas características es cenar y no caer en el error de principiante de “¿hay vino tinto?” respuesta: “no” yo: pueeees, “un gin tonic”. De locos!
Fuimos las cuatro carballesas en Madrid: caro, mara, iria y yo. Caro y Mara finalmente fueron de tu a Boston y yo a California. ¡Encima guapas! Iria se integró perfectamente con nuestro disfraz de boxeadora a última hora, si es que nos entregamos a la fiesta! Reencuentro con las que ya no están, con los de siempre, con amigos cruzados… es increíble la gente que se puede llegar a conocer a través de otras personas. La teoría de los puntos terminará siendo la de las rayas…
La vuelta en metro divertida. Casi mato a luis con mis “saltos Grease” y nos engañaron diciendo que había un bar abierto. Lo único que conseguimos fue volver a casa a 1ºC y yo, como lo había perdido todo, en albornoz!!!
La fiesta fue divertida un año más, aunque ya sabemos que nunca será como la primera. Ese momento de la vida y compañía se puede repetir! Pero los años pasan y los seguimos disfrutando con el mismo entusiasmo.
Os dejo con el video que amenizó nuestra pre fiesta, la verdad que espero que dentro de dos años, no tengamos que hacer un “mira quien baila”, jeje