Bienvend@s a mi rincón...

Siempre dije que algún día tendría un local llamado "El Rincón de Sabela". Era una idea de la que fue, posiblemente, mi época en la que tuve las ideas más peregrinas... quería tener hijos antes de los 25, contaba los pasos que daba por las mañanas hasta el baño y la cocina y, quería a toda costa, vivir mirando al mar. Ahora, en cambio, he madurado. Ahora quiero tener hijos encuentre a la persona ideal o no, jamás cuento los pasos, ya no pongo el despertador a una hora que acabe en el número 7 y decidí que el mar no va a condicionar mi vida. Eso sí, iré a verlo siempre que pueda.
Soy gallega, tengo acento según el día, el momento y el estado de ánimo. Sobre todo, tengo acento cuando tengo borracheras cantarinas, hablo en público o cuando me enfado, que no suele ser muy a menudo. Tengo una apariencia muy tranquila, posiblmente parece que desayuno transilium en vez de mis adoradas galletas príncipe. Pero, el que me conozca más que de tomar unas copas, sabe que mi naturaleza es inestable. Yo es algo que odio, pero supongo que, en el fondo, no es tan odioso para los demás. Vivo todo con intensidad, tengo miedo a ser gris, tengo miedo de no ver mucho a mi familia y que pasen cosas importantes sin que yo sea consciente, tengo miedo de que los míos sufran o de que estén lejos y no estén contentos. Tengo miedo a todas esas cosas, por eso mismo, escribo este blog. Para que estemos más cerca todos los días que podamos.
Sin más que añadir, se despide una alérgica al pepino...